"Alicia Croft" y las declaraciones de Puigcercós centran la campaña

En algún otro post ya hemos hablado del priming, que es la capacidad que tienen los políticos de colocar los debates que más les interesan en los titulares de los medios de comunicación, consiguiendo así que los votantes presten más atención a los temas de campaña en los que sus partidos políticos son más fuertes.

De momento, el PP y Esquerra han conseguido que sus temas (la inmigración y el déficit fiscal catalán) hayan sido los que han tenido mayor impacto mediático y, por ende, los más debatidos de la campaña.

Por una parte, el PP, con su videojuego “Alicia Croft” en el que su candidata, Alicia Sánchez-Camacho, a lomos de su gaviota, Pepe (en clara alusión a los conservadores), dispara contra inmigrantes ilegales. Al poco de haberse hecho público, se retiró el video excusándose el PP en un error de la compañía desarrolladora del juego (compañía, por cierto recientemente creada). Sin embargo, el efecto que se perseguía ya se había conseguido: repercusión mediática. Todos los dirigentes catalanes, desde Artur Mas hasta Joan Herrera , han criticado el videojuego y han aparecido noticias en todas las televisiones y periódicos de ámbito nacional -y lo que es más importante de ámbito…catalán. Éticamente discutible y, desde mi punto de vista, bastante reprobable. Pero estratégicamente brillante. Gracias a este video y a los panfletos contra los rumanos repartidos en el mes de mayo, la posibilidad de que Plataforma per Catalunya les pudiese robar votos -e incluso escaños- se ha esfumado. Electoralmente hablando, el PP va a subir y mucho en Cataluña. Probablemente, consigan los mejores resultados de su historia. Buena parte de culpa la tienen sus asesores de campaña.



Por otra parte, Esquerra se ha beneficiado de las palabras de su líder, Joan Puigcercós, en las que acusaba a los andaluces de no pagar impuestos. Desde Artur Mas hasta el presidente andaluz, José Antonio Griñán, se han posicionado sobre sus declaraciones, que -al igual que el juego del PP- no han tenido adeptos. Sin embargo, el líder republicano ha conseguido centrar el debate electoral en uno de sus principales argumentos de campaña y un tema que preocupa a buena parte de los catalanes y, desde luego, a todo el electorado nacionalista: el déficit fiscal catalán. Y lo que es más importante, se ha convertido en portavoz mediático de esa queja nacionalista.



De momento, el PP y Esquerra han conseguido dos golpes de efecto que seguramente les va a permitir tener mayor porcentaje de voto en las encuestas del próximo domingo que el que les daban hace cuatro días. Y la campaña sigue...