viernes, 30 de abril de 2010

De "Comenzar ilusiona" a "Comienza el cambio"



Después de “Comenzar ilusiona”, CiU inicia el siguiente tramo de su precampaña con un nuevo slogan: “Comienza el cambio”. La coalición nacionalista pretende así confrontar el concepto de “cambio” – utilizado en miles de campañas electorales en todo el mundo – con el de “continuidad”, adoptado por el PSC en su campaña “Sigo creyendo”.

La dicotomía entre un proyecto de cambio y otro de continuidad es clásica en las campañas electorales. Recientemente, el slogan del “cambio” ha sido utilizado tanto por Sebastián Piñera, contraponiéndolo a los 20 años de gobierno de la Concertación en Chile, como por Obama, confrontándolo a los valores de Bush encarnados por McCain. Ya en clave española, hay que recordar que también la usó Patxi López frente a Ibarreche en las elecciones vascas que se disputaron hace año y medio. Los tres gobiernan hoy en sus respectivos territorios. Y sin duda alguna, el slogan más famoso de todos los utilizados en España durante nuestra joven democracia es el “Por el cambio” que esgrimió Felipe González en las elecciones de 1982.

Pero volvamos a la precampaña de CiU. Dentro de la variedad de piezas publicitarias que podrán verse en vallas publicitarias y autobuses y escucharse en radio, dos imágenes resaltan sobre el resto. En la primera, los creativos publicitarios de CiU han recurrido a la sonrisa del nuevo logotipo de CiU para dibujar una curva económica descendente que empieza con la llegada del tripartito a la Generalitat en el 2003 y tiene su punto de inflexión en el 2010 con el regreso de un hipotético gobierno convergente. A partir de ahí, se traza una curva ascendente. El mensaje es claro y sencillo: CiU hará que la economía catalana salga de la crisis.

En la otra pieza publicitaria, aparece un texto que en el que se puede leer “Montilla president” y justo debajo una cara seria como metáfora de la época difícil que atraviesan los catalanes debido a la crisis económica y a la “mala” gestión del tripartito. Al lado, aparece otro texto en el que leemos “Mas president” y justo debajo otra cara - esta vez sonriente - como metáfora de que con el candidato nacionalista vendrán tiempos mejores. El mensaje que pretende transmitir esta pieza es igual de claro y sencillo que el de la anterior.


David Madí, jefe de campaña de CiU, hizo una presentación muy persuasiva sobre el mensaje de cambio que CiU quiere trasladar a los catalanes. La coalición convergente considera que Cataluña no puede seguir así porque se enfrenta a cuatro crisis superpuestas de enorme gravedad: crisis económica, crisis de credibilidad en la política, crisis institucional y crisis nacional. Si CiU insiste en este mensaje, tendrá muchas posibilidades de hacerse con el Govern el próximo otoño.

miércoles, 28 de abril de 2010

A la caza de votos...y no precisamente rumanos




No han pasado ni 3 días desde que se generase la polémica creada por el folleto del PP de Badalona contra los inmigrantes rumanos y algunos se empiezan a dar cuenta de que aquí lo que hay en juego no son ni más ni menos que votos. Y no quieren quedarse atrás.

Ferrán Falco es teniente de alcalde en el gobierno municipal de Badalona que su partido, CiU, comparte con el PSC y ERC. Tras el revuelo creado por el folleto de Xavi García-Albiol, estas son las palabras con las que el jefe de filas nacionalista en Badalona describe a los gitanos rumanos: “Es un colectivo problemático desde el punto de vista de la convivencia y la seguridad pública. La mayoría no se dedica a actividades lícitas”. Y en su blog añade: “No conozco a casi ninguno que viva de nada que no sea la red organizada de mendicidad, el pequeño hurto, el robo de cobre o el robo en establecimientos”.

Más declaraciones, ésta vez desde la izquierda. El líder de ERC ha pedido en una conferencia sobre inmigración que no se criminalice a la población catalana autóctona que denuncia los problemas inherentes a la inmigración "porque no es racista ni xenófoba".

La inmigración ha sido la clave en la resurrección del Frente Nacional de Le Pen en las elecciones regionales francesas y en el creciente apoyo cosechado por la xenófoba Liga Norte en las regionales italianas. En un contexto de crisis como el que estamos viviendo, parece evidente que no se acabarán ahí sus efectos. La inmigración se convertirá – mucho más que el Estatut – en uno de los asuntos centrales durante la campaña electoral catalana y es más que probable que este tema - junto al paro - sea el que decida el próximo arco parlamentario catalán.

martes, 27 de abril de 2010

Los efectos colaterales del Estatut



Lo decíamos hace una semana. El protagonismo que había adquirido Montilla en la defensa del Estatut liderando la solicitud de renovación de los miembros del TC y acusando a Rajoy de ningunear a Cataluña por no contestar a sus llamadas tenía como propósito presentar al candidato socialista como la voz de Cataluña. Los efectos no se han hecho esperar. Según el último Publiscopio, encuesta publicada por el diario Público, el PSC conseguiría entre entre 41 y 43 escaños, lo cual supone un importante avance respecto a los entre 34 y 36 escaños que le daba la última encuesta fiable sobre las elecciones catalanas: la que publicó El Periódico hace un mes. No cabe duda de que en el progreso registrado por los socialistas catalanes, también está jugando un papel importante la campaña en positivo realizada por su jefe de campaña, Antoni Collboni
.

Al PP era al partido al que más le perjudicaba que se volviese a reactivar el asunto del Estatut. Como decíamos la semana pasada, Alicia Sánchez-Camacho había intentado ponerse de perfil en este tema. Sin embargo, el hecho de que el recurso presentado por el PP contra el Estatut haya vuelto a ocupar la memoria de los catalanes y que Rajoy no haya contestado desde un primer momento las llamadas de Montilla ha acabado pasando factura a los conservadores. El PP retrocedería desde los 13 a 14 escaños que le concedía la encuesta de El Periódico a los 10 que le otorga el Publiscopio.

Esquerra consigue acaparar una pequeña parte del descontento del pueblo catalán por el retraso en la sentencia sobre el Estatut registrando cierto progreso desde la horquilla de 12 a 13 escaños que le daba El Periódico hace un mes a los 13 seguros que le concede el Publiscopio.

Por último, los escaños que el sondeo asigna a CIU junto a los que conseguiría el PP serían suficientes para investir a Artur Mas como presidente de la Generalitat pero la distancia entre las derechas catalanas y el tripartito se empieza a reducir.

lunes, 26 de abril de 2010

"No queremos rumanos"



“No queremos rumanos”
es el mensaje que aparece en una de las imágenes del último folleto del PP Badalona, en el que se relaciona inseguridad con inmigración. Vaya por delante que, desde el punto de vista ético, la divulgación de ese folleto me parece condenable.



Ahora hablemos de comunicación política. El PP de Badalona pasó de 5 a 7 concejales en las elecciones municipales del 2007. En esa campaña electoral, los populares badaloneses habían repartido 30.000 copias de un DVD en el que mezclaba inmigración con el incremento de la delincuencia. Otro dato: Plataforma Per Catalunya, un partido catalán de ultraderecha, saltó de 1 a 4 concejales en Vic en esas mismas elecciones haciendo una campaña claramente xenófoba. La inmigración da votos. Es un hecho. Al menos, en las elecciones municipales.

La clave no son los 5.000 folletos que el PP de Badalona ha repartido. El objetivo que se buscaba a través de esos pasquines era generar polémica. Y es evidente que se ha conseguido a la luz de la difusión que la iniciativa ha logrado en medios de comunicación como La Vanguardia, El Periódico, El País o El Mundo. Desde esa perspectiva, la estrategia de Xavi García-Albiol, líder del PP de Badalona, es muy inteligente. Más aún teniendo en cuenta que Plataforma Per Catalunya ha anunciado su propósito de presentarse a las elecciones municipales en Badalona y amenaza con quitarle una parte de su electorado por la derecha.


Sin embargo, desde el punto de vista de la comunicación política, el folleto tiene dos fallos:

• La contraportada, en la que aparece una foto de García – Albiol junto a la cual se puede leer el siguiente texto: "Estoy a sólo dos concejales de ganar las elecciones municipales. Si en 2011 soy el alcalde os aseguro que: Podremos salir por el barrio con la seguridad de no ser acosados o atracados. Quien viva en Badalona tendrá que adaptarse a nuestras normas y costumbres". Es evidente que el párrafo no sólo no oculta que el candidato del PP a la alcaldía de Badalona está haciendo un uso electoral de la inmigración sino que lo muestra claramente, lo cual hace perder credibilidad a la iniciativa.

• Y el momento elegido para distribuirlo. En El Confidencial Digital ya había aparecido una noticia que informaba que el PP de Cataluña iba a basar su campaña para las elecciones autonómicas en la inmigración. Al haberse visto obligada a pedir perdón por esta iniciativa del PP de Badalona, Alicia Sánchez-Camacho ha perdido varias de las “balas anti-inmigratorias” (prohibición del burka, de las mezquitas, oposición al empadronamiento de ilegales) que tenía preparadas, ya que si insistiera en la inmigración tras este episodio, el resto de partidos le acusaría de xenófoba. Desde el punto de vista de la estrategia política, el PP habría hecho mejor repartiendo ese folleto después de las elecciones catalanas.

miércoles, 21 de abril de 2010

Una táctica menos arriesgada que tener grupo parlamentario propio



Montilla ha desatado la caja de los truenos al no descartar que los 25 diputados socialistas catalanes apoyen una hipotética propuesta conjunta presentada por todos los partidos catalanistas en el Congreso para renovar el Tribunal Constitucional.

Probablemente sólo los más viejos del lugar lo recuerden pero hubo una época en que existían tres grupos parlamentarios socialistas en el Congreso: el del PSOE, el del PSC y el del PSE. La experiencia duró cinco años. En 1982, tanto el PSC como el PSE tuvieron que renunciar a su grupo.

En el año 2004, hubo un conato de división entre el PSOE y el PSC tras el viaje de Carod Rovira a Perpignan para entrevistarse con dirigentes de ETA. En aquella ocasión, tras la negativa de Pascual Maragall a tomar medidas contra el entonces presidente de Esquerra, José Blanco sondeó, por orden de Zapatero, a Celestino Corbacho para que encabezara una federación catalana del PSOE que compitiese en las elecciones generales con el PSC. Desde entonces, ríos de tinta se han escrito acerca de un hipotético grupo parlamentario socialista catalán. No han sido pocos los miembros del ala catalanista del PSC que han pedido tener grupo parlamentario propio: Pascual Maragall, Montserrat Turá, Ernest Maragall. El último fue Antoni Castells, conseller de Economía y líder de esta corriente.

Si los 25 diputados socialistas catalanes unieran su voto al de CiU en una propuesta a favor de la renovación del TC que no votase el Grupo Socialista, se abriría la caja de Pandora. Esta decisión podría ser el embrión de un grupo parlamentario socialista catalán que dejaría al grupo parlamentario del PSOE con 144 escaños, es decir, 10 diputados menos que el PP, que se convertiría en el primer grupo parlamentario dentro del Congreso. Las consecuencias serían letales para el PSOE. Pero el PSC también se arriesgaría a que el PSOE tome la decisión de competir en las elecciones generales con ellos. Y no hay más que ver la diferencia entre los resultados del PSC en las elecciones autonómicas y en las generales - en las que se presentan con las siglas y candidato del PSOE a la presidencia del gobierno - para ver la cantidad de votos y escaños que se dejarían por el camino.

Montilla ha descubierto una táctica para influir en la política española menos arriesgada que tener grupo propio en el Congreso. Se trata de insinuar la posibilidad de que en el futuro los socialistas catalanes voten de forma distinta que el Grupo Socialista. Y parece que le está dando resultado. Las últimas noticias señalan que tanto Zapatero como Blanco han defendido hoy que la renovación del Tribunal Constitucional es urgente, en contra de lo que afirmaban el domingo, cuando daban la razón al PP. Esas declaraciones de hoy abren la puerta a que haya una propuesta de todo el Grupo Socialista en el Congreso a favor de dicha renovación, que salvaría la cara a Montilla. Otra cosa es que esa renovación se produzca.

martes, 20 de abril de 2010

Y de todo esto, ¿qué opina el Partido Popular de Cataluña?



En los últimos días, el Partido Popular de Cataluña ha mostrado un acusado perfil bajo ante el aluvión de declaraciones del resto de partidos catalanes acerca de la indecisión del Tribunal Constitucional sobre el Estatut. Muchos se preguntarán cómo un partido tan combativo con el Estatut se ha limitado a tan sólo lamentar el retraso en la decisión del Tribunal Constitucional y a pedir a sus magistrados que la sentencia no se demore más de lo estrictamente necesario. Alicia Sánchez-Camacho, presidenta del PP catalán, no ha hecho ni siquiera mención a la derrota de la ponencia de la vocal progresista Elisa Pérez Vera que avalaba en su mayoría el Estatut.



Todo tiene su explicación. A finales del 2003, las izquierdas catalanas firmaban el llamado Pacto del Tinell, que excluía al PP de cualquier pacto de gobierno, ya fuese a nivel autonómico o estatal. Cuatro años después, Artur Mas acudía al notario para certificar que no pactaría con el PPC en caso de que sumase con los conservadores la mayoría necesaria para formar gobierno. Estos dos acontecimientos han desterrado al PPC de la política catalana durante los últimos 7 años. Sin embargo, ahora las últimas encuestas conceden a los populares catalanes un papel decisivo para que Artur Mas sea investido presidente de la Generalitat. Y, “curiosamente”, el líder nacionalista sostiene que ahora el PP habla más de economía y menos del Estatut, lo cual se debe de entender como vía libre a un nuevo pacto con el PP o, al menos, como la revocación de la firma de Mas ante notario.

En el Partido Popular saben, por tanto, que están ante una oportunidad de oro para salir del aislamiento político al que han estado sometidos en Cataluña durante un lustro y medio. Sin embargo, la sentencia del Estatut les ha vuelto a colocar en el punto de mira. Los populares catalanes intuyen que cualquier salida de tono sobre este tema avivaría la memoria de los catalanes sobre su papel en el recurso contra el Estatut, les perjudicaría electoralmente y, a la postre, imposibilitaría que CiU pueda justificar ante su electorado un hipotético pacto con el PPC. Esa es la razón por la cual los conservadores están poniendo especial cuidado en no efectuar una declaración más alta que otra sobre la norma estatutaria.

¿Cuál es el objetivo del PPC? Obtener la fuerza parlamentaria suficiente para apuntalar la mayoría de Mas en el Parlament a cambio de que los convergentes hagan lo propio con Rajoy en el Congreso dentro de dos años. ¿Y la receta? Más economía y menos Estatut.

lunes, 19 de abril de 2010

¿Por qué Montilla insiste en la renovación del Tribunal Constitucional?



El PSC y el PPC son los partidos a los que más ha favorecido la “no sentencia” del Tribunal Constitucional sobre el Estatut. Una sentencia que hubiese recortado el Estatut habría facilitado el victimismo de CiU y, sobre todo, de Esquerra, movilizando a sus respectivos electorados. Otro de los efectos derivados de un dictamen adverso habría sido colocar al PPC como culpable del fallo, lo cual imposibilitaría un hipotético pacto de gobierno de los conservadores con los convergentes. Una sentencia desfavorable, por último, habría puesto de manifiesto la incapacidad del PSC de influir en los órganos del Estado y de dirigir una hipotética respuesta consensuada de todos los partidos catalanes, ya que cada fuerza política hubiese intentado sacar réditos electorales de la sentencia por su cuenta.

Montilla está al corriente de que la sentencia tendrá que esperar hasta después de las elecciones catalanas porque es prácticamente imposible que el magistrado Guillermo Jiménez consiga una sentencia que concilie las posiciones de magistrados tan conservadores como Rodríguez Zapata, Delgado o Conde con las del progresista Aragón. Por ello, cabe preguntarse cuál es la razón por la que Montilla - no satisfecho con haber evitado una sentencia antes de las elecciones - sigue insistentemente pidiendo la renovación del Tribunal Constitucional.


El presidente de la Generalitat sabe que el pueblo catalán no es independentista pero también es consciente de que a los ciudadanos catalanes – o al menos a aquellos que votaron el Estatut - no les gusta no tener la última palabra sobre el texto estatutario. Sus maniobras solicitando una renovación del Tribunal Constitucional que aumente el número de magistrados progresistas - más favorables a una sentencia favorable al Estatut - y acusando a Rajoy de ningunear a Cataluña, por no contestar a sus llamadas, van dirigidas a presentarse como la voz de Cataluña frente al “enemigo exterior”. Esta estrategia neutraliza políticamente a convergentes y republicanos, al menos en lo que a temas identitarios se refiere. Además, esta defensa numantina del Estatut otorga al presidente de la Generalitat un plus de legitimidad de cara a presentar a los dirigentes de CiU como aventureros radicales cuyo fin no es otro que la independencia de Catalunya. De hecho, ya lo está haciendo.

La estrategia de Montilla tiene sentido pero debe coordinarla con el PSOE porque declaraciones como la de Leire Pajín en las que manifiesta que el TC tiene toda la legitimidad para dictar sentencia ponen de manifiesto lo poco que los socialistas catalanes influyen en el PSOE. Es por ese lado por donde CiU puede atacar al PSC: insistiendo en la falta de influencia de los socialistas catalanes en Madrid y, por tanto, en su falta de capacidad para defender los intereses de Cataluña frente a la conocida capacidad de influencia de la coalición convergente.

jueves, 15 de abril de 2010

Una web a la que le falta storytelling



Ayer aludíamos a la web “Construim Catalunya”, cuyo propósito es dar a conocer las actuaciones realizadas en materia de infraestructuras por el Govern entre los años 2006 y 2010. Hoy vamos a hablar de ella como ejemplo de lo que no se debe hacer para comunicar una acción de gobierno.


Cuando desde Fundación ONCE - en colaboración con la agencia publicitaria Shackleton - lanzamos la campaña de sensibilización CAPACITADOS a través de un documental y una campaña de publicidad en TV, radio y soportes exteriores, pensamos que era fundamental complementarla con una web donde se mostrase el documental y pudiéramos cuantificar el número de personas que accedían a la web bien porque habían visto el documental o el spot. Pero más importante aún era ofrecer en la web testimonios de líderes de opinión (Gabilondo, Herrera, López Schlichting…) sobre cómo se habían sentido al ver el documental así como mostrar en la misma web frases de empresarios sobre el rendimiento profesional de las personas con discapacidad con las que trabajan.

En las campañas de divulgación de una acción de gobierno, es todavía más importante que en otras campañas utilizar como recurso testimonios de personas describiendo cómo esa acción de gobierno les ha cambiado su vida o parte de ella. En “Construim Catalunya”, no ves un solo testimonio de alguien que relate, por ejemplo, cómo le ha beneficiado el hecho que el Govern haya construido un hospital o un centro educativo cerca de su casa y no verse así obligado a desplazarse 50 km más lejos para ir al médico; o cómo la construcción de una vivienda protegida ha servido para que su familia - de extracción humilde - pase de vivir en una chabola a un hogar digno; o cómo la construcción de un centro deportivo ha ayudado a que su hijo se interese más por el deporte que por las drogas.

Resumiendo, en la web se ven algunos videos de inauguraciones pero falta relato (o lo que llamamos en comunicación política, storytelling). Y un storytelling contado por los principales protagonistas: los ciudadanos que se benefician de esas infraestructuras.

miércoles, 14 de abril de 2010

Busca las diferencias entre “Construimos Catalunya” y "Construimos Cataluña con hechos”


El Govern acaba de lanzar una web para dar a conocer las actuaciones realizadas en materia de infraestructuras durante la presente legislatura.


Curiosamente, el lema del portal web, “Construim Catalunya” (Construimos Cataluña), es prácticamente idéntico al slogan bajo el cual los socialistas catalanes celebraron varias jornadas de carácter preelectoral en noviembre para explicar su acción de gobierno contra la crisis. Las jornadas se llamaron “Construim Catalunya amb fets” (Construimos Cataluña con hechos). Las coincidencias no terminan aquí. El color (rojo) es el mismo y las grafías iguales.



Es una estrategia común entre los partidos intentar rentabilizar electoralmente su obra de gobierno mediante anuncios publicitarios institucionales en época preelectoral. Un claro ejemplo son las vallas publicitarias del Plan E, que ya se pudieron ver en la campaña de las elecciones europeas pero que se prevé seguirán presentes en las calles españolas hasta abril del 2011 – en plena precampaña de las municipales -, cuatro meses después de finalizadas las obras.

En el caso que nos ocupa, además, la publicidad institucional coincide con la publicidad que el partido en cuestión realizó cuatro meses antes. CiU ha recurrido la web ante la Comisión Asesora de Publicidad solicitando que aclare si el portal vulnera el artículo 4 de la Ley de Publicidad Institucional por solapamiento de mensajes, colores y grafismos entre el Gobierno y un partido político.

Joaquim Nadal, consejero de Política Territorial y Obras Públicas, ha replicado que CiU ya utilizó en su propaganda partidista “Construim Catalunya” en 1983. Sin embargo, el problema en este caso no está en el slogan de partido sino en el posible solapamiento de ese slogan con el lema de una campaña de publicidad institucional, lo cual puede dar lugar a confusión entre lo que hace el Gobierno y lo que hace un partido. Una lectura atenta del artículo 4 a) de la Ley de Publicidad Institucional catalana da las claves para saber si la comisión amparará el recurso de la coalición nacionalista. Juzguen ustedes.

A) La utilización no partidista de la publicidad institucional: Ninguna comunicación publicitaria institucional debe ser partidista, ni tener puntos de similitud con la publicidad que lleve a cabo ningún partido político para su propia imagen o la captación de afiliados. Siempre es preciso desmarcar claramente la publicidad institucional de la propaganda política. En este sentido, debe evitarse la confusión y coincidencia de las campañas institucionales con las campañas electorales, con excepción de las campañas institucionales referidas al propio proceso electoral.

Última información: Aplazadas las deliberaciones del Tribunal Constitucional en torno al Estatut.

martes, 13 de abril de 2010

¿Qué temas decidirán las elecciones catalanas?



Un elemento clave para pronosticar qué temas serán decisivos en las elecciones catalanas es su fecha de celebración ya que la situación no sería la misma en el caso de una convocatoria electoral en junio - con la resaca de una hipotética sentencia del Estatut y una España todavía en recesión - que en el caso de que se convoquen elecciones cinco meses después. Fuentes socialistas señalan que las elecciones se celebrarán casi con total seguridad el domingo 28 de noviembre. La previsión tiene lógica, ya que Montilla necesita tiempo para poder remontar en las encuestas y para que los catalanes empiecen a palpar los efectos de las medidas contra la crisis del gobierno socialista.

En ese escenario, el efecto de una hipotética sentencia del Tribunal Constitucional desfavorable al Estatut, se habría neutralizado para el día de las elecciones, si - como parece - los magistrados del máximo órgano constitucional resuelven este mes o en el siguiente. Pero tres temas se vienen repitiendo en las encuestas como los que más preocupan a los ciudadanos catalanes, incluso por encima del Estatut:

 El paro, que será sin duda alguna el tema principal de campaña. La crisis está pasando factura a todos los gobiernos (Zapatero, Sarkozy, Obama…) y los datos de paro de septiembre suelen mostrar repuntes en las cifras de desempleo. El reto para el PSC consistirá en conseguir hacer olvidar a la ciudadanía catalana esos datos y en seguir presionando al gobierno central para que adopte las medidas necesarias para que las cifras de octubre sean positivas. Los socialistas catalanes tienen la dificultad añadida de que su electorado es el que más sufre el paro y, por tanto, el que tiene más motivos para la desmovilización, que ya se ha percibido en las elecciones europeas.
 La desafección de los catalanes hacia los políticos. La ineficiente gestión del tripartito (apagón, nevada, incendio de Horta, cercanías…), los casos de corrupción y la sensación de que los políticos no se preocupan por los problemas cotidianos de la gente será un elemento clave a la hora de votar. Montilla lo sabe y ya se ha empezado a desmarcar de ERC e ICV insinuando que, aunque el tripartito sume mayoría absoluta, podría salir un Govern diferente de las urnas de otoño.

 La inmigración está modificando el comportamiento electoral de los catalanes, sobre todo en las ciudades más estrechamente vinculadas a la izquierda como Badalona y Reus, en donde las filiales locales del PPC- con una política de inmigración dura - arañan votos a los socialistas elección tras elección. Una de las últimas encuestas realizada por El Periódico ponía de manifiesto que un 24% de los catalanes no descartaba votar a un partido con políticas anti-inmigratorias y que un 7% probablemente lo haría. Este dato coloca virtualmente a Plataforma per Catalunya, de Josep Anglada, en el Parlament e induce a pensar que el PSC puede perder un reguero de votos por esta cuestión.


En definitiva, Montilla tiene una campaña muy dura por delante, ya que actualmente tiene en contra los tres temas que más preocupan a los catalanes. Su supervivencia política dependerá de cómo sepa manejarlos.

lunes, 12 de abril de 2010

UPyD se hace el harakiri en Twitter



Hace un par de semanas, UPyD se disolvía en Twitter. Esta es la parte de la historia que le llegó a muchos seguidores de UPyD en Twitter (en concreto, 376) al ver la siguiente imagen en su pantalla de ordenador.

Evidentemente, esa no es toda la verdad. La cuenta de UPyD en Twitter había sido creada por un simpatizante valenciano de esta formación política que se desprendió de ella tan pronto como se dio cuenta de que UPyD, según él, no servía a sus ideales. El problema no está en esos 376 seguidores que pudieron creer que UPyD se suicidaba políticamente. El problema está en que esta noticia ha sido publicada por Terra, uno de los portales más leídos por los internautas españoles. El daño a la reputación del partido de Rosa Díez está hecho pero este percance se podría haber evitado con un Twitter de UPyD oficial.

La anécdota pone de manifiesto el riesgo de no contar con una política de comunicación online seria. UPyD en Cataluña cuenta con un candidato conocido, Antonio Robles, y se presenta como un partido nacional y desacomplejado con un mensaje igualitario y a favor del bilinguismo que sería comprado por muchos catalanes abstencionistas y votantes del PP y del PSC. Pero corre el riesgo de no hacer llegar ese mensaje por una presencia insuficiente e inadecuada en la red. El ejemplo más claro es que no tiene un Twitter oficial. Pero no termina ahí. Sólo hace falta comparar la página web de Ciutadans – su directo competidor en Cataluña- con la del partido de Rosa Díez para darse cuenta de quien ha invertido – o se ha preocupado – más por la comunicación online. Otra pequeña muestra: entra en el Facebook de UPyD, a ver cuánta actividad hay.

Hay que estar en la red sí o sí. Si no, corres el riesgo de que tu público te olvide u... otros cuenten tu mensaje por ti.

sábado, 10 de abril de 2010

El deporte como expresión de la política



Hoy es día de fútbol así que, como aperitivo del partido del año, os regalo el excelente artículo de Oscar Santamaría, publicado ayer en El Mundo, sobre los vínculos entre política y deporte.

No le falta razón al autor cuando afirma que nada simboliza mejor el enfrentamiento entre comunidades que la lucha de sus equipos en la cancha. Algunos actores de la precampaña catalana verán el enfrentamiento de hoy entre el Barca ("mas que un club") y el Madrid ("el mejor embajador de España en el extranjero") como un choque entre Cataluña y España.


Aquí tenéis el link al blog de Luis Arroyo donde podéis descargaros el artículo de Oscar, aparte de disfrutar con el comentario de Luis.


jueves, 8 de abril de 2010

¿A qué partidos afecta más la corrupción en términos electorales?



Esta semana, Joan Puigcercós, presidente de ERC, efectuaba unas declaraciones en las que sostenía que al PP no le van a afectar electoralmente las nuevas noticias que han aparecido tras el levantamiento del secreto sumarial del caso Gurtel. Todo ello en base a que los votantes de derechas, según Puigcercós, son impermeables a la corrupción. Añadía que, por el contrario, el votante de izquierdas es mucho más exigente moralmente. Dirigentes del PP y de CiU ya han respondido al líder de Esquerra exigiéndole una rectificación.


Pero analicemos los hechos. ¿Es verdad que la corrupción afecta menos, en términos electorales, a la derecha que a la izquierda? Es evidente que, a la luz de los resultados electorales y las encuestas, el coste electoral que ha tenido el caso Gurtel para el PP ha sido mínimo. Un mes después de que estallará el caso Gurtel en febrero del año pasado, Núñez Feijoo ganaba en Galicia por mayoría absoluta y Basagoiti conservaba posiciones en Euskadi erigiéndose en árbitro de la política vasca. Más datos: una encuesta publicada por La Razón el pasado domingo le daba al PP una ventaja de 6 puntos sobre los socialistas pero aún más reveladora es la encuesta de Público - realizada en los días en que Jaume Matas declaraba ante el juez como imputado - que ampliaba la mayoría absoluta de Francisco Camps en la Comunidad Valenciana en cuatro escaños. Por su parte, CiU tampoco se resintió en las encuestas tras la detención de Prenafeta y Alavedra. Parece claro que los ciudadanos a la hora de votar se preocupan más de cómo está su bolsillo que de cómo los políticos dejan las arcas públicas.


En las 2 últimas legislaturas de Felipe González, también se oyeron voces que acusaban a los votantes del PSOE de pasividad ante la corrupción. Finalmente, el electorado de izquierdas reaccionó y facilitó el cambio. Puigcercós, que es zorro viejo, está apelando sibilínamente a que los votantes del PP y de CiU cambien el sentido de su voto o que, al menos, se queden en casa el día de las elecciones. Su maniobra es buena pero que lo consiga dependerá de que sus socios socialistas consigan enderezar la situación económica.

miércoles, 7 de abril de 2010

Independientes, ¿en las listas o en la Generalitat?



En los últimos días, se ha publicado una noticia en la prensa catalana que no ha tenido el eco esperado - el caso Gurtel manda - pero que puede influir de forma importante en las próximas elecciones catalanas. Me refiero al anuncio de Artur Mas de no incluir independientes en las listas de CiU aunque sí en su hipotético Govern.

Mas ha justificado esa exclusión argumentando que habrá gente que no quiera que se le relacione con un partido determinado. Él sabe que esa no es la verdadera razón. El problema es que muchos miembros de la sociedad civil catalana se acuerdan de la frustrada experiencia de Manuel Pizarro como número dos del PP en las pasadas elecciones generales, tras la cual el ex presidente de Endesa no tuvo más remedio que calentar el asiento de la oposición durante casi dos años. Ese es el motivo por el que esos destacados miembros de la sociedad civil catalana prefieren que Artur Mas les llame para formar gobierno que engrosar sus listas al Parlament, no vaya a ser que tengan que pasar por la misma experiencia que Pizarro. Es verdad que CiU puede fichar a independientes de segunda fila para sus listas pero los grandes sólo aceptarán una vez que Mas sea president.



No nos engañemos. El efecto que produjo la inclusión de Baltasar Garzón en las listas del PSOE durante la campaña electoral de 1993 fue demoledor, ya que contribuyó decisivamente a que el electorado socialista confiase en Felipe González para combatir la corrupción y el PSOE remontase en las encuestas. Contar con independientes de renombre en las listas de tu partido es un aval. Sin embargo, no es tan importante que Artur Mas les incluya en su lista como que los catalanes visualicen la segura inclusión de independientes de izquierdas en su gobierno, como los hay en el de Sarkozy (Kouchner, Vesson, etc).

En las pasadas elecciones catalanas, a David Madí, jefe de campaña de CiU, le salió el tiro por la culata con su DVD Confidencial Cat, que terminó movilizando a los electores socialistas y republicanos. Madí ha cambiado acertadamente de estrategia y está realizando una campaña de perfil bajo dejando que sean la crisis y los errores del tripartito los que provoquen que los electores de izquierda voten a los nacionalistas o, al menos, les dejen en casa el día de las elecciones. Mas necesita apuntalar esa estrategia. Dando por supuesto que incluir independientes de izquierda de calado en las listas de CiU se antoja una misión imposible, una maniobra que permitiría a la coalición nacionalista mostrar a los votantes de izquierda su apertura sin comprometer a independientes durante una legislatura sería nombrar antes de las elecciones un comité de sabios independientes que redacte las primeras medidas de un Govern de CiU, tal y como hizo Zapatero meses antes de las elecciones del 2004. Algunos de esos sabios – Solbes, Sebastián o Moratinos – se convirtieron en ministros poco después.

martes, 6 de abril de 2010

Cambio de caras en la campaña del PSC



Justo antes de Semana Santa, José Montilla nombraba a Jaume Collboni jefe de campaña del PSC en sustitución de José Zaragoza, secretario de organización de los socialistas catalanes.




La designación de Collboni, secretario de Programas y Acción Electoral del PSC, supone un cambio de estilo respecto a las anteriores campañas de los socialistas catalanes. José Zaragoza pasaba por ser el autor de campañas tan agresivas – y dicho sea de paso, tan exitosas - como “Si tu no vas, ellos vuelven”. Con Collboni veremos una campaña en positivo que pretende explicar la obra de gobierno del tripartito a la sociedad catalana. Este abogado procedente de los cuadros de UGT está plenamente convencido de que las campañas en negativo contribuyen a crear desafección hacia la política.




Un análisis riguroso de los hechos inclina a pensar que los socialistas catalanes se equivocan de estrategia. Las posibilidades del PSC de ganar las elecciones pasan por movilizar a su electorado contra CiU, como ya hizo en las elecciones generales contra el PP en circunstancias muy adversas. Los votantes de los socialistas catalanes - que curiosamente son aquellos a los que más les afecta la crisis y por tanto los más desmovilizados electoralmente - no van a acudir a las urnas por el simple hecho de que se presente al president de la Generalitat como gente seria - que es algo que se le supone - sino por la introducción de elementos en la campaña que desacrediten a CiU como alternativa de gobierno.

Por otro lado, la elección de Collboni como jefe de equipo electoral no tiene por qué ser equivocada. Su acertada utilización de las redes sociales y su experiencia sindicalista pueden dar un perfil activista a la campaña del PSC. Además, ver cómo el jefe de campaña de los socialistas catalanes te sigue en Twitter te da una idea de su humildad, que es probablemente la mejor carta de presentación para alguien que empieza a dirigir campañas electorales y probablemente el camino adecuado hacia el éxito. No hay que descartar nada pero Collboni debe revisar su estrategia electoral porque los mayores éxitos del socialismo catalán se han obtenido en campañas crispadas.